Frutas y Verduras de Temporada
Gracias a los grandes avances tecnológicos, hoy en día podemos conseguir con facilidad frutas y verduras originarias de cualquier parte del mundo y cultivadas en cualquier época. Sin embargo, no nos damos cuenta de las repercusiones que esto conlleva, como los gastos de transporte, gasto de energía y refrigeración al tener que conservarse mejor y durante más tiempo hasta el punto de venta, así como el uso de pesticidas y herbicidas, que pueden alterar el ciclo natural perturbando las características nutritivas y organolépticas del alimento.
Todo esto se podría evitar consumiendo frutas y verduras de temporada, teniendo en cuenta la zona de cultivo de cada una, ya que mantendríamos la biodiversidad de cada zona, conservaríamos el comercio de cada localidad, ahorraríamos energía y gastos de transporte y, finalmente, consumiríamos los alimentos más frescos y sanos.
Las frutas y verduras frescas son alimentos necesarios que nos aportan hidratación inmediata por su alto contenido en agua. Mejoran el tránsito intestinal por su contenido en fibra y aportan vitaminas y minerales necesarios para el buen funcionamiento de nuestro organismo.
Son la base de la dieta mediterránea, pues el consumo de frutas debe ser de tres piezas diarias, siendo una de ellas cítrica y dos raciones diarias de verduras.
FRUTAS DE VERANO
Aguacate: Estupendo ingrediente para salsas, rico en grasa mono insaturada (buena).
Albaricoque: Fruta sabrosa y dulce que nos aporta energía.
Breva: Da energía al organismo.
Cereza: Fruto pequeño, pero diurético.
Ciruela: De cualquier color tiene fibra y mejora el estreñimiento.
Frambuesa: Refresca y estimula el apetito.
Fresa: Rica en antioxidantes.
Grosella: Contiene vitamina A, mejora la vista y la piel.
Higo: Hermano de la breva, son los más dulces y tiernos.
Kiwi: Aporta vitamina C y ácido fólico, atractivo y exótico ingrediente para platos.
Limón: ¡Dale saborcito a los postres!
Manzana: Para quienes realizan ejercicio físico fuerte o trabajo intelectual intenso ¡ésta es tu fruta!
Melocotón: Suave por fuera, jugoso por dentro y favorece la digestión de las grasas.
Melón: Una de las frutas más refrescantes del verano.
Mora: Fresca y frágil, nos aporta energía, vitaminas A y E y potasio.
Naranja: Para un desayuno completo, no puede faltar el zumo de naranja.
Níspero: Contiene fibra soluble y el ser rico en potasio le hace una fruta diurética.
Pera: Carnosa, refrescante, jugosa y ayuda a mantener los niveles de azúcar en sangre.
Piña: En zumo, en salsa, en ensaladas, como postre… de todas maneras facilita la digestión.
Plátano: Rico en potasio, bajo en sodio y nos aporta energía inmediata.
Sandía: Si tienes sed, ¡bebe un vaso de sandía!
VERDURAS DE VERANO
Ajo: Mejora la circulación sanguínea y ayuda a bajar la tensión.
Berenjena: Facilita las digestiones y ayuda en el buen funcionamiento del hígado.
Brécol: La familia de las coles son las más ricas en vitamina C.
Calabacín: Mejora las digestiones.
Cebolla: Su aporte en fibra, minerales y vitaminas la convierten en un excelente alimento regulador.
Endibias: Bajo aporte calórico. Destacan las vitaminas B9, A y C.
Espinacas: Muy rico en fibra y vitaminas del grupo B.
Judías verdes: Apenas contienen energía pero son muy ricas en minerales y vitaminas.
Lechuga: Ideal para hacer ensaladas de todo tipo… ¡cuantos más colores tenga, mejor!
Pepino: Rico en potasio, mineral necesario para la transmisión del impulso nervioso y para la actividad muscular.
Pimiento: Muy ricos en vitamina C, sobre todo los de color rojo.
Rábano: ¡Añade un poco de vitamina C a tus ensaladas!
Tomate: Fuente de antioxidantes y ¡rey de las ensaladas!
Zanahoria: La reina de la vitamina A.
No hay comentarios:
Publicar un comentario